La vuelta de The Verve. A robar a los bancos.

Hace unos meses un suceso sacudió a la prensa especializada en rock en el mundo. Desde la cadena BBC 1 de Londres se anunciaba la reunión (¡otra reunión más!) de esa increíble banda de los 90 que fue The Verve.
Al parecer, Richard Ashcroft se convenció de que su carrera solista no iba para ningún lado (a mí me gustaron sus discos, pero seamos realistas) y decidió pegarles un llamado a sus ex compañeros de banda e invitarlos a tomar un té, un mate o lo que venga.
Así fue que se juntaron estos cuatro cerebritos que editaron aquel álbum increíble llamado "Himnos Urbanos" allá por 1997 y se pusieron de acuerdo en lo siguiente: "nos juntamos, volvemos a tocar y si Dios quiere rapiñamos algún par de libras esterlinas que anden volando por ahí".
Entonces sacamos la siguiente conclusión: son todos unos oportunistas, desde Soda Stereo hasta The Police, pasando por Genesis y tantas otras bandas que ven el hueco por donde pueden seguir ganando algo de dinero y vuelven sin ninguna propuesta renovadora. Todos estos grupos significaron algo en sus épocas y sus vueltas sólo opacan aquellas verdaderas revoluciones musicales de sus tiempos. Tomá.

Igual The Verve hizo canciones como estas:

Bittersweet Symphony


Drugs don´t work


Lucky Man


Yippee-ki-yay, motherfuckers.